Santo Domingo.- El Ministerio de Educación ha confirmado una noticia esperada por muchos sectores de la sociedad: la materia de Moral y Cívica será reincorporada al currículo oficial a partir del año escolar 2025-2026. Este anuncio, realizado por el ministro Luis Miguel de Camps, marca un giro importante en la estrategia educativa del país, poniendo un énfasis renovado en la formación integral de los estudiantes.

La decisión de traer de vuelta esta asignatura fundamental no es casual. Responde a un sentir generalizado sobre la necesidad de fortalecer los principios éticos y ciudadanos desde temprana edad. Según palabras del propio ministro, la meta va más allá de la simple transmisión de conocimientos académicos. "La educación con valores no solo es enseñar contenidos, sino que forma ciudadanos", destacó De Camps, subrayando que este ha sido un tema prioritario en las conversaciones sobre el futuro del sistema educativo.

Una Apuesta por la Formación Ciudadana
La reintroducción de Moral y Cívica se presenta como una medida específica y obligatoria para solidificar la base de valores en los jóvenes. Lejos de ser un mero formalismo, la materia está diseñada para ser un pilar en la construcción de una mejor sociedad. Se busca que los estudiantes no solo aprendan sobre sus deberes y derechos, sino que desarrollen un compromiso activo con su comunidad y su país.

Este esfuerzo no anula ni reemplaza el trabajo que ya se realiza de forma transversal en otras áreas del saber. Al contrario, viene a complementarlo y a darle un espacio propio y estructurado. La intención es clara: que la formación en valores sea una constante visible y sólida en la vida escolar de cada niño y adolescente.

¿Qué se Enseñará en la Nueva Asignatura?
El contenido de la renovada materia de Moral y Cívica será práctico y adaptado a los desafíos actuales. El ministro explicó que se abordarán temas cruciales para la convivencia y el desarrollo sostenible. Entre los puntos clave se encuentran:

Ciudadanía y Constitución: Para que los jóvenes conozcan a fondo las leyes que rigen la nación y la importancia de su participación democrática.
Ética y Convivencia: Incluyendo aspectos tan cotidianos y vitales como las normas de tránsito, buscando fomentar una cultura de respeto y seguridad vial.
Medioambiente: Fomentando una conciencia ecológica y la responsabilidad de cada individuo en la protección de los recursos naturales.
Este enfoque integral busca dotar a los estudiantes de herramientas para convertirse en agentes de cambio positivo dentro de sus comunidades.

El plan para transformar el sistema educativo dominicano, presentado bajo la hoja de ruta 2025-2028, está alineado con el Pacto Educativo Nacional. Dicho plan se erige sobre pilares fundamentales que reconocen a los estudiantes como el eje central, a los docentes como los guías del aprendizaje, y a las familias como un soporte esencial en este proceso.

De Camps resaltó que esta estrategia busca garantizar una educación que ofrezca aprendizajes reales y abra puertas a mejores oportunidades de empleo. El fortalecimiento de la calidad docente, la mejora de la infraestructura escolar y una gestión transparente son también prioridades en este nuevo capítulo para la educación dominicana. La vuelta de la educación con valores a través de una materia específica es, sin duda, uno de los pasos más significativos en esta dirección.

Fuente: Declaraciones del ministro de Educación, Luis Miguel de Camps, durante la presentación de la hoja de ruta 2025–2028.